Por Alexandra Vásquez, congresista por Cundinamarca
Las plazas de mercado de los municipios de Colombia y Latinoamérica son consideradas espacios de encuentro y cultura popular, así lo confirma la Universidad Javeriana en su Revista de Estudios sobre Patrimonio Cultural, (vol. 33, 2020), donde advierte que estas «se convierten en resguardos de conservación y resistencia cultural, donde se preservan expresiones del patrimonio material e inmaterial, contribuyendo a la protección de diversas expresiones de la tradición oral y la herencia alimentaria».
Es por ello por lo que desde el Congreso de la República y como representante electa por los cundinamarqueses he emprendido una lucha por representar el sentir de los ciudadanos, en este caso de Girardot, que pedían que su plaza de mercado Leopoldo Rother fuera restaurada y su legado mantenido.
Resalto la gestión y organización de los miembros de este histórico lugar, así como del comercio y personas que viven a sus alrededores, quienes llegaron a mi oficina en Bogotá hace más de un año a exponer sus deseos de que este, su segundo hogar o centro de acopio, pueda embellecerse, organizarse y estructurarse alrededor del comercio y sus tradiciones.
Desde ese momento, con mi equipo de trabajo, empezamos a liderar una tarea mancomunada con el Gobierno nacional, en cabeza del Ministerio de Cultura. El 16 de marzo de 2023 iniciamos los acercamientos necesarios para lograr el permiso que se requiere para que pueda ser intervenida; teniendo una primera visita en abril de 2023, por parte del equipo de Patrimonio del Ministerio, quienes identificaron problemas de goteras, de techos, del manto asfáltico, adecuaciones, entre otros, que presenta la edificación.
A pesar de los cambios de ministros de Cultura durante los últimos meses, siempre hubo un acercamiento a ellos con el mismo objetivo. Logrando consolidar el pasado 28 de febrero de 2024 una mesa técnica para que MinCultura y la nueva administración de Girardot pudieran sentarse y hablar sobre este bien de los girardoteños.
No desconozco que ya había unos recursos por parte del Gobierno departamental, pero faltaba el permiso de Cultura, que era la preocupación que nos atendía. En buena hora, resalto la propuesta que hizo el ministro Juan David Correa, a propósito de que la Leopoldo Rother es un patrimonio histórico y fue construida por la misma persona que hizo la Universidad Nacional de Colombia, para contactar a arquitectos de este claustro universitario en busca de que apoyen la iniciativa de su reforma.
Pero no solo fue eso, también desde esta cartera hubo un compromiso por parte del ministro Correa, que expresó su disponibilidad en anudar esfuerzos entre la nación y el departamento para llevar a feliz término las obras.
A Julio Quijano, representante de la Veeduría que se organizó para la remodelación en la plaza de mercado, agradezco su reconocimiento a mi labor y a lo que hemos conseguido después de haberlos recibido en las instalaciones del Congreso.
A Girardot le reitero que hay un deseo del Gobierno nacional, departamental y local porque este proyecto se haga una realidad. Mi compromiso continúa desde mi curul en la Cámara de Representantes: haré todos los esfuerzos posibles para poder seguir tejiendo este trabajo y seguir hilando, principalmente, con la comunidad, que es a quien yo represento en el legislativo.
Por supuesto, haremos el control político necesario, no solamente a los millonarios recursos que se van a invertir, sino a la ejecución y a cada decisión, requiriendo que siempre sean tomadas teniendo en cuenta a la comunidad.
